nada

Científicos colombianos en el área de Ciencias Sociales y Humanas

Luz del Socorro Ramírez Vargas

Publicado, 04-11-2008

Con gran entusiasmo y una sonrisa, que se dibuja siempre en sus labios, cuando habla de su trabajo académico, centrado, especialmente, en las relaciones internacionales de Colombia con las naciones vecinas; la investigadora Socorro Ramírez relata su labor como la mayor especialista del tema en el país.

Luz del Socorro Ramírez Vargas
Perfil elaborado en octubre de 2008

Posdoctorada en el Institut des Hautes Études de l´Amérique latine (IHEAL) de la Universidad Sorbonne Nouvelle – París III; Doctora en Ciencia Política de la Universidad Sorbona, Paris 1; Magister en Relaciones Internacionales de la Universidad Sorbona, París 1, Magíster en Análisis de Problemas Políticos, Económicos e Internacionales Contemporáneos del Instituto de Altos Estudios para el Desarrollo de la Universidad Externado de Colombia y el Programa de l'Institute d'Etudes Politiques de Paris y Licenciada en Historia de la Universidad Pedagógica Nacional.

Los más de quince años analizando las fronteras colombianas en temas que van más allá de los límites geográficos, le han permitido a Socorro Ramírez, convertirse en la mujer con mayor autoridad del país, en el conocimiento de la interacción política, económica y social de Colombia con Venezuela, Ecuador, Brasil y los países caribeños, entre otros.

La pasión que demuestra al hablar sobre estas temáticas se refleja, igualmente, en su producción intelectual que alcanza trece libros, cincuenta y cuatro participaciones con artículos en libros, ochenta artículos en publicaciones seriadas y revistas impresas, múltiples textos en revistas electrónicas y como columnista invitada, en periódicos de circulación nacional como El Tiempo y El Espectador y la revista Cambio.

Política exterior de Colombia y América Latina, teoría y práctica de las relaciones internacionales, relaciones de vecindad, procesos de integración regional, conflicto colombiano y conexiones internacionales y la convivencia en zonas limítrofes son parte de los temas abordados en sus publicaciones.

Militancia política
Fue en la década de los años 70, cuando Socorro Ramírez se inscribe como militante de las organizaciones políticas socialistas de la época, militancia que la llevo a ser candidata a la presidencia de Colombia en estos años. Su vinculación a los movimientos sociales de mujeres, los grupos ambientalistas y sindicalistas de los educadores, le dejaron “principios muy fuertes en torno a la necesidad de buscar niveles de justicia, equidad, transformación del Estado y de las políticas públicas en los países en vías de desarrollo”, asegura.

Una investigación que no se quedara simplemente en la revisión de textos sino que fuera a las fuentes, que tratara de contrastar miradas, de involucrar a todos los actores y visibilizar el máximo de dimensiones era la que se proponía la profesora Ramírez permitiéndole incidir en las decisiones políticas de los países que estudia; lo cual no es muy frecuente en los académicos.

“Participé de la corriente socialista de los años 70 y 80, parte de la cual, en la década del 80 resolvió disolverse, por cuanto no veíamos perspectivas; estábamos en contra de la lucha armada que no ayuda a la transformación, ni a procesos sociales y, en cambio, genera la polarización; confrontación militar que deja muy pocos márgenes para la acción de las comunidades y de los actores sociales. La caída del muro de Berlín y la quiebra del socialismo me generaron interrogantes que me llevaron a replantear muchas de las ideas que movilizaban el proyecto socialista del que había hecho parte”, menciona.

{* title=Fronteras, vecindad e integración}
Fronteras, vecindad e integración
Viajar continuamente entre Colombia y Venezuela, Ecuador, Brasil y el Caribe hace parte de la cotidianidad de la profesora Ramírez, quien a través de su labor investigativa ha desarrollado una línea de trabajo en fronteras, vecindad e integración.

“Los procesos de integración regional generalmente se suelen analizar desde la revisión de los flujos comerciales; en mi trabajo académico los he enfocado de una manera más integral porque creo que la integración tiene en la economía y el comercio un motor pero no se agota allí. He analizado los procesos andinos, del gran caribe, del cono sur desde una perspectiva política y de relaciones internacionales, me he preguntado por la institucionalidad construida para la integración y he comparado los procesos de construcción de políticas sociales y de cooperación”, menciona.



También, las dinámicas intergubernamentales de concertación política como parte de los procesos de integración; los actores que toman, inciden o padecen las decisiones de la integración, los mecanismos de participación en cada uno de los procesos de integración, son varios de los factores de análisis de esta línea investigativa de fronteras, vecindad e integración.

“He estudiado, igualmente, el tema de la integración y la seguridad desde la democracia, casi todos los grupos de integración han evolucionado a plantear una cláusula democrática y acuerdos en materia de seguridad; las he comparado, contrastado y hecho un seguimiento de ellas. De igual manera, casi todos los grupos se han propuesto tener una política exterior común, he contrastado sus distintas definiciones pero también las aplicaciones en uno u otro momento”, expresa la investigadora.

La vinculación a redes académicas de América Latina y el Caribe, ha sido para la profesora Socorro Ramírez un factor clave, para el efectivo desarrollo de esta línea de investigación, “ya que se pueden someter las propias investigaciones al debate y recibir otras miradas que enriquecen el trabajo”. De igual manera, otro enfoque de la vecindad y las fronteras, le ha permitido aportar otro análisis distinto de estos fenómenos que no se reduce a considerar la línea limítrofe sino las interacciones que éstas generan a nivel social, cultural, ambiental, económico y de seguridad.

“El pasado 20 de julio de 2008, por primera vez, vimos asumir oficialmente la frontera de Colombia con Brasil y Perú como una triple frontera algo en lo que habíamos venido insistiendo. Todo lo que ocurre allí no puede ser pensado en términos nacionales ni siquiera binacionales, pues ese ámbito tiene que ser pensado en términos trinacionales, no solo porque las etnias compartidas tienen esa característica y los ecosistemas no se limitan a donde llega la raya divisoria sino que todas las lógicas históricas de poblamiento, la dinámica económica y los problemas de seguridad solo pueden ser vistos de manera trinacional; las miradas nacionales se estrellan en las fronteras porque las fronteras no son simplemente la raya limítrofe, las fronteras son articulaciones, interacciones de toda naturaleza, y además, son un motor para la vecindad y la integración”, afirma.

{* title=Incidencias investigativas}
Incidencias investigativas
Una primera etapa se inició con la participación en redes caribeñas que permitieron una mirada comparada de las dinámicas insulares, del istmo centroamericano y de los tres grandes del Caribe –México, Venezuela y Colombia- así como contribuir a la idea de Gran Caribe y a su materialización en la construcción de la Asociación de Estados del Caribe, entre vecinos distantes y desconocidos, fragmentados por lenguas, historias, culturas pero necesitados de construir regímenes cooperativos para hacerle frente a ese mar semicerrado y a las posibilidades que ofrecen las fronteras, la vecindad y la integración.

Una segunda etapa, ha sido el trabajo conjunto entre académicos venezolanos y colombianos, el cual ha sido coordinado por la profesora Ramírez desde hace doce años; y ha logrado un análisis sistemático de los temas más álgidos de la relación colombo venezolana, que ha generado cinco libros, una veintena de reuniones académicas binacionales y contribuciones a las políticas de frontera y de vecindad de los dos países.

“Ha sido una experiencia extraordinariamente rica, por ejemplo, en el primer trabajo que hicimos se mostró cómo venía evolucionando la opinión pública de los ciudadanos y cómo los años 90, por una fuerte integración entre las economías de los dos países, unos acuerdos intergubernamentales muy sólidos y una dinámica fronteriza muy profunda, cambiaron la percepción de los venezolanos sobre los colombianos que había alimentado la tensión binacional cuando, en los años 70 y 80, la relación gravitaba exclusivamente sobre los diferendos limítrofes; ese trabajo impacto mucho porque sacaba la relación de esos lugares comunes que se van volviendo estereotipos muy simplificadores de las realidades complejas”, dice.

Incidir políticamente es uno de los aspectos que resalta Socorro Ramírez con sus investigaciones, “de hecho los últimos gobiernos en Colombia y Venezuela han incorporado a quienes hemos coordinado estos procesos académicos como parte de la Comisión de Vecindad, cuyos miembros, hasta ese momento, representaban la forma cómo cada país miraba al otro, así todos los miembros colombianos eran empresarios porque Colombia percibe a Venezuela como un gran negocio y todos los miembros venezolanos eran militares porque Venezuela percibe a Colombia como un gran problema de seguridad; la incorporación de académicos que teníamos puntos de vista comunes fue muy interesante porque introducía otras miradas, otros acercamientos del tema, más proactivos, más documentados y sustentados, entonces, todo el trabajo que hemos hecho tiene una repercusión en la medida en que una relación tan compleja lo permite”.

De la misma manera, desde hace cuatro años, ese mismo proceso se ha desarrollado con académicos de Ecuador; trabajo que ha sido muy oportuno en los momentos de tensión que han vivido los dos países pues “han existido momentos en que la relación encuentra en lo académico un eslabón que con lo fronterizo permite que fluya en momentos en que no hay relaciones diplomáticas”.

La construcción de la red andino amazónica para analizar los temas de seguridad en las relaciones de la región fue otra etapa del trabajo investigativo de Socorro Ramírez, la cual se concentró en aportar otra mirada de la integración distinta a la de los flujos comerciales. Además, hizo parte de una iniciativa de la cancillería brasileña que encargó a centros académicos de ese país la realización de diversos encuentros sobre los países andinos. “Cuando oía a los expertos brasileños que habían escrito sobre Colombia, les decía ‘perdónenme pero estamos hablando de otro país’; la falta de acercamiento, la mirada solo por la prensa, por libros, por imágenes o percepciones de las lecturas nacionales dan una imagen distorsionada, entonces, este tipo de trabajo en red, ayuda a confrontar esas percepciones y eso ha permitido romper ciertos paradigmas”, declara.

Influir en dinámicas intergubernamentales, ayudar a construir políticas públicas para abordar y desarrollar sus compromisos en espacios fronterizos, entre países vecinos y en la integración regional así como contribuir a que la Universidad Nacional, por su carácter, aporte en temas donde se construye nación, son para Socorro Ramírez parte de las satisfacciones que le ha dejado su trabajo como investigadora y docente durante estos años.

{* title]=Docencia e investigación, matrimonio inseparable}
Docencia e investigación, matrimonio inseparable
Como docente titular del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales, IEPRI, de la Universidad Nacional de Colombia, Socorro Ramírez asume la docencia y la investigación como un matrimonio indisoluble.

Sus clases en el IEPRI no solo están dirigidas a los estudiantes de la Maestría de Estudios Políticos sino que muchas de ellas se llevan a cabo en otros espacios como auditorios de organismos gubernamentales, la cancillería y otras universidades, en donde participan funcionarios diplomáticos, funcionarios de todos los ministerios que tienen que ver con cada país, militares, ONG, y organismos internacionales, que han llegado a sumar más de 300 personas que asisten a sus cursos.

Las cátedras Ecuador, Venezuela, Brasil y Gran Caribe, que ha orientado, han tenido como invitados a diversos académicos, diplomáticos y funcionarios, lo que “de alguna manera le ha servido al país para conocer más la problemática y diversidad de las fronteras, las dinámicas y percepciones de los vecinos, y a que en momentos de crisis tengan espacios de diálogo, de acercamiento, de acciones conjuntas”.

Vida personal vs vida laboral
Casada con el, también, académico Luis Alberto Restrepo desde hace más de 25 años, Socorro Ramírez confiesa que su vida personal nunca se separa de su trabajo, “así como evalúo con satisfacción los resultados laborales también me evaluó críticamente porque no he tenido límite y realmente he abusado de mi salud, todo lo conseguido, ha sido a costa de que no he tenido vacaciones, que no tengo fines de semana, que trabajo hasta tarde, que madrugo mucho y eso no puede ser, eso no es sano”.

Con la convicción de pasar a nueva fase en su vida personal, en la que el descanso, la lectura de literatura e historia y los viajes de placer y no solo de trabajo, en compañía de su esposo, de quien asegura ha sido lo mejor que le ha dado la vida y un compañero esencial, con el que comparte reflexiones, discusiones y preocupaciones académicas y políticas, la profesora Socorro Ramírez concluye que aunque le apasiona su trabajo, de manera tal que la involucra totalmente; la vida… no es solo el trabajo.

AVISO COOKIES+

Universia utiliza cookies para mejorar la navegación en su web.
Al continuar navegando en esta web, estás aceptando su utilización en los términos establecidos en la Política de cookies.

Cerrar +